Una oleada de sitios y blogs difunde información optimista para un cambio de mentalidad
Cristóbal Ramírez
El País
El País
MADRID.- Max tiene 12 años, dos gatos, un perro y muchos sobresalientes. Es de Toronto, Canadá, pero vive con su madre en un típico chalet norteamericano de un barrio de Orlando, donde se ve poca gente porque cada uno está metido en su casa. Su vida parece bastante prototípica. Pero no es así: de 16 a 21 trabaja en una página web que es mitad periódico y mitad programa de televisión, que sólo ofrece noticias positivas. El es el director. El la fundó en 2007 y ha estado acreditado para los pasados Juegos Olímpicos de Invierno en Vancouver. Weekend News Today ( www.hnheadlines.com ) cuenta historias personales positivas, explica cómo es el auto más barato que se vende en Estados Unidos o entrevista al inventor del juguete que crea burbujas de colores. Max se va a la cama a las 21 y se levanta a las 4, para trabajar más.
-¿Y cuándo hacés los deberes?
-En el ómnibus del colegio.
-¿Qué dicen tus padres de que trabajes tanto?
-Están muy orgullosos. Yo me organizo con los estudios.
-¿Cómo se te ocurrió el proyecto?
-Cuando una profesora mencionó que odiaba ver noticias tristes.
Max sólo es la punta de lanza. Con la crisis y su porción diaria de tragedia, han surgido como hongos blogsy sitios online que pretenden sacudir al mundo para que espabile, insuflar aire fresco a la sociedad. Después de casi dos años de recesión y unos cuantos más de agresión al medio ambiente, existe en la Web una oleada de ciudadanos de a pie que piden información para el cambio. Es la revolución optimista.
Otro mundo es posible. La vieja consigna de los movimientos sociales y antiglobalización parece renovarse. "Hay un desafío que va con nuestro planeta", claman los hermanos Sebastián y Cristóbal Díaz, chilenos, que pusieron en marcha el año pasado El Buen Diario ( www.elbuendiario.cl ). Dicen: "Tiene que ver con nuestra existencia y nuestra evolución como seres. Debemos generar un cambio ahora. Si no, va a llegar un punto de no retorno. Tenemos que construir una sociedad comprometida con nuestro ambiente, dejar de lado lo económico y conectarnos con lo esencial del ser humano". Su sitio, sin publicidad y sin sentido comercial, tiene títulos así: "Primer vuelo solar", "Jóvenes y niños discapacitados se integran en la sociedad a través del teatro", "Fútbol como liberación entre las rejas del Robben Island".
Jorge Dobner, con sus 62 años, está ya de vuelta de todo. Este periodista argentino, con más de 30 años viviendo en España, ya retirado, actualiza cada día la página El Mundo en Positivo (www.elmundoenpositivo.com ). "Se trata de dar visibilidad a las iniciativas que generan buenas noticias y devolverles el espacio que les corresponde. Hay que recuperar la confianza en el ser humano".
A Graham Forrest, traductor inglés que vive en España, lo ponen nervioso la rentabilidad, los dividendos y la carrera por subir en la escalera social. Por eso creó Noticias Positivas ( www.noticiaspositivas.net ) en 2008. Lo hace sin esperar nada a cambio. Por amor al arte. Lo ayudan dos amigos y cada día envían a los suscriptores de la página una noticia positiva. "Creemos que el cambio tiene que salir de las personas". La clave, afirma, es la creación de pequeñas redes humanas.
Esta revolución también hierve al calor de la web 2.0, donde se difuminan las figuras de emisor y receptor. El Twitter de Notipositivas registra el espíritu zen de las noticias diarias. Son los microproyectos a los que se refería Graham.